En el año 2018, los miembros fundadores de Permanece el amor fuimos contactados, de forma individual, para conocer nuestro interés en apoyar el trabajo de un comedor para niños que se encontraban en situaciones precarias en el Fraccionamiento Colinas del Roble, a un lado de la Clínica de Especialidades 180 del IMSS.

El comedor era resultado de la iniciativa personal de una habitante del Fraccionamiento ante la necesidad que percibía entre la comunidad del fraccionamiento: niños en estado de desnutrición, sin familias, sin existencia social – es decir, sin estar registrados ni contar con un acta de nacimiento – violentados física y emocionalmente e incluso manipulados para apoyar actos ilícitos en la zona.

Este acercamiento y trabajo con lo que empezamos a llamar “El Comedor de Robles” nos fue sensibilizando ante estas y otras necesidades que fuimos encontrando no solo en el mencionado fraccionamiento, sino en la región y que se extendían a ámbitos no solo infantiles, sino que afectan a jóvenes, adultos, individuos, familias y grupos sociales. La variedad social de los habitantes de la zona, también nos permitió percibir que si bien la situación de calle, pobreza extrema o salud son situaciones que necesitan ser atendidas, también la disfunción familiar, las disforias y las situaciones relacionales se presentan en todos los estratos sociales y necesitan ser identificadas, tratadas y apoyadas.

Estas fueron nuestras motivaciones para que en el año 2020 decidiéramos consolidar el trabajo realizado en Robles en forma de una Institución de Asistencia Social Privada a la que decidimos llamar Permanece el amor dado que ante todo es nuestro amor al prójimo el que nos mueve e impulsa en esta labor y registrarla bajo la figura jurídica de Asociación Civil.
El trabajo por afianzar la Asociación Civil no ha carecido de algunos obstáculos, ya que fue hasta noviembre de 2022 en que logramos la autorización como donataria y en enero de 2023 la misma fue publicada en el Diario Oficial de la Federación, pero finalmente avanzamos en el inicio de nuestros programas sociales y en el soporte y base que afiance y consolide a nuestra Asociación como un puente filantrópico entre quienes necesitan y aquellos que pueden…¡Dar amor!